Mundos para-lelos
Acá no somos libres. Debemos dejar la más inaplazable ocupación para correr tras los espejos cuando ustedes van a mirarse. Nos toca sonreír falsamente, excoriar la piel, improvisar el llanto, ejecutar los movimientos más absurdos…, todo para no decepcionarlos o asustarlos, para alimentar su vanidad, para corroborar diagnósticos, para que no los acusen de locos…
Guillermo Bustamante Zamudio
Convicciones y otras debilidades mentales, 2003
N.B.: A partir de este relato, los alumnos de 1º de ESO deben escribir una redacción en la que cuenten con todo lujo de detalles a qué se dedica su yo del otro lado del espejo mientras no tiene que asomarse por uno de ellos a nuestro mundo…
Tranquilación 
este para q dia era ?
Para el miércoles, como la ficha de lectura de El medallón perdido.